BARRIO
SAN BOSCO
El
autor Hernan Blanco
El Barrio
San Bosco fue un pedazo de pantano arriba que cambió de nombre
a raíz de la construcción en el sector de la
capilla en honor a San Juan Bosco en el año 1943. Los
primeros en mudarse hacia ese sector en el año 1937 fue
la familia de Bernal Hurtado y Estéfana Valdez, padres de
Juan, María, Jesús, Asunción, Chayo,
Francisca y Gregoria. Además de los Hurtados
construyeron casa en este lugar, Carmen Ugarte, Antonia
Nava, José Colina, Juana María Reyes, Sabas Arévalo
y un Señor de Nombre Cristóbal. Este sector era la gran
ciénaga que más tarde recibió el nombre de
Tanque de los Díaz.
Los
primeros chamos y chamas que jugaron e hicieron travesuras por
estos lados fueron precisamente los hijos de esas primeras
familias que hemos mencionados. Los hijos de Estéfana y Bernal
Hurtado, Gregoria, Francisca, Juan, María de Jesús; los
hijos de Asunción Valdez y Melquíades Chirinos, Irma;
los hijos de Presentación Ugarte y Pastora Peña, Luz
María, Yolanda Teresa y Darío Peña; los hijos de
Pausalino Zea y Gregoria Hurtado, Teodoro, Braulio Cecilio, Pausalino
Jr. María; Los hijos de Asunción Valdez y Bartolo
Garcés, Hipólito, Brígido Benito (Pedro),
Teófilo, Ana, y Mercedes.
La
casa de Antonia Nava, que también se dice era Orlando López
Mendoza, quizás era la mejor casa del barrio, hecha de barro,
con techo de tejas y piso de ladrillo. Ésta estaba frente a la
casa de María Ávila de González. La casa de
Cristóbal era una casita que estaba en medio del único
terreno enmontado y cercado que había por el sector, parecía
una casita sacada de un cuento de hadas, donde vivía una
familia muy aislada y poco sociable, de apellido Salas, aunque eran
buena gente. Entre los cuales recordamos a Ifigenio, el
menor del grupo y quien más interactuaba con la muchachada del
barrio, era un cándido muchachote de hablar tartamudo,
que caminaba balanceándose parsimoniosamente, de trato afable,
que gozaba del aprecio de todos los vecinos. Este espacio en la
actualidad comprende, el Centro Cívico, la casa de Goyo Cuba y
el pedazo de calle de la Sierralta. Al parecer este sitio debió
ser un lugar de crianza, porque muchos de los vecinos recuerdan haber
visto un molino de viento en el lugar.
Después
hizo casa Victoriano González Teodoro Higuera, Más
hacia el centro hicieron casas Monche Villa y Antonio Peniche que
fueron los primeros en construir para ese sector. Después
llegó Gregorio Sánchez y Eduvigis, los cuales llegaron
de Pantano Abajo a mediados del año 49. Los hermanos Ávila,
Ángel y Félix también se vinieron a vivir al
sector. Este último fue quien construyó la casa donde
viviera Pepe Lupe, la cual vendió después que una
de sus hijas sufriera quemaduras ocasionadas por un rayo que cayó
en la cocina una tarde lluviosa.
ANTONIO PENICHE
Es
importante resaltar que al norte de la Av. Los Médanos residía
la familia Chávez, (los más antiguos pobladores de esta
localidad). Dicha Familia la constituían los esposos Chávez
Barrio, Esteban y Tomasa junto a sus hijos Martín, Florentino,
María, Natividad, Carmen, Eloína y Eloísa. A
esta familia se integran posteriormente los hermanos Juan de la Cruz
y Ángel María Batista. Otras familias que podrían
considerarse fundadores fueron entre otros Obdulio González y
Agustina Galicia, abuelos de Tomasa Galicia. Más tarde llegó,
Abundio González, Juan Vicente Leal (Pache) y Emilia,
Luis Jiménez y su Esposa Carmen, Luisa Isparraguirre y Lola
Azuaje, José Ramírez y su señora Presenta, la
familia Nava, la familia Loaiza y la familia García, que
estaba desde mucho antes por el sector conocido como El
Tanque
de los Díaz. La familia Catillo, Bernardo y Vicenta y la
familia Sangronis, Alejandro y Eduarda llegaron en
el año
1950
LAS
BODEGAS DE SAN BOSCO
La
primera bodega de San Bosco fue la Bodega Altamira de Victoriano
González, después siguió la de Antolino
Guerrero. En el sector también hubo otras bodegas. La tercera
fue la de Nicolás Martínez y la cuarta la de
Martín Galicia estuvieron en el mismo sitio que la de
Antolino, mudándola después para la esquina
Duvisí con la calle dos San Bosco, hoy Agustín
García. Martín fue un personaje muy querido y apreciado
en nuestro barrio por su don de gente. Lourdes Higuera y Felipe
Loaiza también tuvieron una bodega al lado de la Bomba de
Gasolina de Nanito Pulgar, en la Av. Los Médanos frente a la
Iglesia de San Juan Bosco, de allí la mudaron para la casa de
Pedro Ventura, la cual quedaba donde hoy está la de Julio
González. Julio González también puso una bodega
en aquella fea calle que después se convertiría en la
Av. Josefa Camejo. Le siguieron la Bodega Tírame Algo de Simón
Lucena y Cucha, y la Bodega El Águila de Miguel Morillo.
También tuvieron bodega al Este de la Iglesia, Justiniano
Loaiza, Delfín Romero y Lolo Ventura. Este último
desapareció misteriosamente y nunca más se supo de él.
Su hijo Rubén Ventura lo busco hasta más no poder, por
todas partes, pero todos sus esfuerzos resultaron inútiles. A
Lolo se lo tragó la tierra. Chimino Guanipa también
tuvo una bodega en la Calle Duvisi.
La más antigua hasta el presente son la Bodega de Beto Galicia.
ANTOLINO
GUERRERO
Antolino
Guerrero fue el fundador en el barrio del primer centro de recreación
familiar. Este sitio estuvo por la calle Duvisi.. Allí
funcionó un bolo donde los hombres de la comunidad acudían
a recrearse. Antolino, con una pequeña planta eléctrica
suministraba energía a algunos vecinos que podían
pagarla. Este era el único sitio electrificado de la
comunidad, en el que se concentraban muchas personas por la noche
para escuchar música y las novelas que estaban muy de
modas ese tiempo.
LA
EDUCACIÓN EN SAN BOSCO
La
primera Escuela a donde acudieron los jóvenes del barrio
funcionó en la sociedad Virgen del Carmen que fundara en la
calle González cruce con Miranda el Señor Pedro Acosta
Cordones.
La
primera escuela pública del Barrio San Bosco funcionó
en una casa de media agua con piso de tierra que estuvo en el lugar
donde ahora se encuentra la casa del Dr. Cuba. Fueron maestras en
esta escuela Esther Escalona y Rosa Cayama. Eso fue por el año
1946 cuando Ramona Molina contaba con once años de edad. Según
Ramona la maestra Rosa les daba una merienda de guarapo de leche con
cambur.
Otra
escuelita Municipal que estuvo por barrio fue la que Atendía
la Maestra Esther Solano de González. Esta estuvo en el
callejón José Gregorio Hernández, hoy Cepeda
Pinillo, al lado de la bodega de Rómulo Calatayud. La Maestra
Solano También trabajó en una de las primeras
escuelas de Chimpire, donde por cierto comencé yo a estudiar.
Estaba ubicada en la Calle Iturbe con Buchivacoa.
En
la Iglesia, en la época del padre Rota enseñaba Anita
Petit y posteriormente el Padre Guillermo Parra, compañero
del Padre Chiampitti. También tuvo una escuela entre la
Duvisi y Callejón Páez la maestra María
Piña, en la casa de Carmen Peniche. Otra maestra que regentó
una escuela frente a la bodega de Beto Galicia, fue Tila Mujica. En
la casa de Antonia Nava que ya hemos mencionado daba clase un hijo de
ésta, de nombre David. Rubén Sánchez y lo
hermanos Zea, recibieron instrucciones de este señor.
LOS COMIENZOS
DE LA COMUNIDAD CRISTIANA
Antes
de construirse la capilla de San Juan Bosco, las catequesis en El
Pantano la recibían los niños en la casa de Carmen de
Cortez. Allí venía el sacerdote desde San Gabriel. Un
poco más arriba debajo de un yabo recibió catequesis
Juan Hurtado y otros niños. A ese sitio acudía
también el cura probablemente el Padre López o el
P. Santico de San Gabriel.
La
capilla de San Juan Bosco como hemos afirmado, se construyó en
el año 1943 por los hermanos Julián y Teolindo Lugo. La
limpieza del terreno comenzó en el año 1942 por un
grupo de hombres de la comunidad que dirigía Aquiles Mujica en
compañía de Ángel Ávila, Juan García,
Pinito Díaz, Juan de La Cruz Batista y su señora Eloína
Chávez y Obdulio González. Para la faena de limpieza
compraron una cabra por 12 bolívares para darle de comer a los
trabajadores. Las herramientas de limpieza eran guardadas en la casa
de Obdulio González. La casa parroquial es lo que hoy
conocemos como el Ambulatorio San Juan Bosco
P.
Mario Rota es quien inicia las actividades pastorales en nuestra
comunidad. En el año 1944 hizo su comunión en dicho
templo Juan Penso Naveda pero el catecismo la daban en la casa de
Carmen Ugarte que estaba detrás de la familia Mujica, la
propia Carmen y Nanito Cortez eran los catequistas en ese tiempo.
Juan cuenta que el padre Rota lo pasaba a buscar el domingo a las
cuatro y media de la mañana, además de tocar
las campanas Juan ayudaba al padre como monaguillo y también
repartía los ticket a los muchachos que iban a la misa,
constancia necesaria para poder tener derecho a la merienda de la
tarde. Los panes los donaban al P. Rota en la Panadería
Pelayo.
Entre
otros jóvenes que entonces acudían a la capilla a
catecismo y a jugar en los columpios, toboganes, sube y baja o tabla
de equilibrio estaban, Egidio Castillo, María y Carmen Dávila,
Irma, Arminda, Reinaldo Rivero, José Polanco, Estilita de
Arias, Teófilo y Pedro Garcés, Fabián Higuera
Rigoberto Molina, y Rubén Sánchez, Esteban Rivero
Neptalí Medina, Cándido Peña y Mayo Quero entre
otros
Teodoro
Zea nos comentó que en el patio de la capilla jugaban béisbol
con pelotas que ellos mismo elaboraban con pedazos de trapo viejo, y
que los guantes los elaboraban con lona que el padre Rota les
compraba
Quien
tocaba las campanas y además cuidaba la iglesia fue señor
Wenceslaos Arias, mejor conocido como Vence.
La
primera organización católica de la comunidad la
fundaron la familia Mujica y la familia Guerrero, Chávez,
Ávila, Gonzales y Batista.
El
padre Mario Chiampitti realizó una importante actividad
social, cultural, deportiva y religiosa en toda el área
de la parroquia San Juan Bosco. Con bolsas de comida
Chiampitti socorría a las familias más pobres de la
comunidad. En ocasiones se mataba algún bovino o cochino para
repartirlo entre las familias las personas más necesitadas. En
el área deportiva Chianpitti dotó de implementos
deportivos a los jóvenes para que practicaran deportes como
béisbol, fútbol y ciclismo, El equipo de ciclismo Era
dirigido Por el Sr. Cono Carrano, dueños de la Tortuga Shop.
Entre los ciclista estaban José Faneite, Germán Lugo y
Francisco Vargas (Varguita), e Ismael Rosillo y Nestor Yarit entre
otros. También Crea una escuela de música y una escuela
básica que dirigía el Padre Guillermo parra. En la
cátedra de música estuvieron Germán Lugo y
Carlos Delgado, Ismael Rosillo, y Claudio Castillo entre
otros. Educación básica hasta segundo grado recibió
José Faneite, Argimiro y Jesús López a quienes
llamaban los plebeyos también estudiaron en dicha escuela.
El
padre Chiampitti organizó en grupo musical al que le pusieron
el nombre de Ritmo Infantil, el cual se presentaba en el Programa que
el mismo animaba junto a Luisa Lugo, en Radio Coro. El Programa se
llamaba Campanadas. Esta agrupación estaba integrada entre
otros, por Chente Peña, Ybrahin Leal, Amado Hidalgo, y
los hermanos Palencia del grupo Duvisi, Roberto, Tomás,
Honorio, y Pompeyo
Cuenta
Ismael Rosillo que el P. Chiampitti llevaba un registro de asistencia
para premiar a final de año aquellos muchachos que acumulaban
mayor número de asistencia durante el año. Entre otros
amigos recuerda a Raúl y Edgar Smith, José Gotopo y a
Pedro Silva. Una anécdota que Ismael recuerda, era que todos
los muchachos se veían obligados acudir a la misa para poder
obtener el vale que daba derecho a optar por los implementos
deportivos. Quien no iba a Misa no encontraba guantes par jugar
El
padre Chiampitti organizó en grupo musical que llamaron Ritmo
Infantil el cual se presentaba en Programa que el mismo animaba junto
a Luisa Lugo en Radio Coro. El Programa se llamaba Campanadas. Esta
agrupación estaba integrada entre otros por Chente Peña,
Ybrahin Leal, Amado Hidalgo y los Hermanos Palencia.
El
P. Chiampitti de nuestra ciudad fue transferido a Valencia y de
allí al Junquito donde estuvo como capellán,
posteriormente viajó a Alemania donde fallece
Asi
era en barrio entonces 1960
.
.
CHIAMPITTI
Y EL CICLISMO
En
la década del 50 al 60 el ciclismo en El Pantano tuvo mucho
auge entre los pantaneros. En esa época competían en
ciclismo Pompeyo Ventura, Porfirio Arcaya, Francisco Vargas, José
Isabel Faneite, Ángel López, Leonel Rossel, Julio
Andara, Marcos Navarro, José Camargo, Marcos Navarro, José
Polanco, Justiniano Batista, Francisco Reyes, también
participaron un italiano de nombre Armando, y un portugués de
quien se desconoce el nombre. En ese tiempo era presidente del IND.
Un andino de apellido Contreras Díaz... Este Señor
según cuenta Pompeyo fue un dirigente muy preocupado por
el ciclismo Según Manche Hernández también
animó esta disciplina deportiva un Coronel de apellido
Martínez, que estuvo destacado en la cárcel de Coro. El
Señor Cono Carrano también se preocupo por el
desarrollo de esta actividad.
El
Padre Chiampitti fue un fanático empedernido del ciclismo que
llegó a tener su propio equipo llamado San Bosco. Este equipo
Junto a la Mañana y Cerveza Zulia siempre estuvieron
enfrentándose en las distintas competencias realizadas en la
ciudad mariana.
Una
anécdota curiosa que sucedió con el padre Chiampitti y
sus ciclistas tiene que ver con su desmedido fanatismo por el
ciclismo. En una ocasión el equipo de San Bosco debió
participar en una carrera desde Mirimire hasta Coro. El Padre salió
algo tarde con sus muchachos en una camioneta Ford, siendo
sorprendido por un espantoso palo de agua que les hizo retardar la
llegada a su sitio de destino y para colmo de males no hallaron
hospedaje en la mencionada población.
Al
padre y su grupo de ciclista no les quedó otra alternativa que
dirigirse a un burdel que quedaba por la cercanía del
pueblo para solicitar hospedaje, allí le ofrecieron dos
habitaciones donde encerró a los atletas con candado mientras
él se iba a dormir en su camioneta.
A
las siete de la mañana ya el padre estaba levantado con sus
muchachos listos para irse al sitio de la partida. Esta fue una
carrera muy accidentada, la gran mayoría de los ciclistas no
llegaron a la raya de meta que los esperaba en la Av. Miranda
de nuestra ciudad. José Isabel Faneite ciclista del equipo de
San Bosco y Protagonista de esta odisea llegó a la meta a la
una de la tarde cuando ya no había nadie en el sitio.
Según
Porfirio Arcaya, mejor conocido como La Dara, asegura que la primera
carrera de bicicleta que se realizó en Coro, partió
desde La Vela. Las bicicletas eran de paseo. Corrieron entre otros
Pompeyo Reyes, Gabriel Guanipa, Felipe Loaiza, Andrés Díaz,
los morochos Amaya, el sastre, Jansen, Wilson, El promotor fue un
señor de apellido Villavicencio, oriundo de Caracas y el
señor Cono
Carrano.
Una bicicleta de paseo costaba entonces 200 bolívares
Definitivamente
es gracias a la presencia de la Congregación Salesiana que se
produce la transformación y civilización de nuestra
comunidad. El nombre de San Juan Bosco, se hizo parte de nuestra
cultura influyendo de tal manera que una parte del Pantano, sector
norte emergiera como el barrio San Juan Bosco Es debido a esa
influencia que las calles comienzan a ser identificadas con el
nombre del Santo. La calle que pasaba al frente de la capilla
adquiere el nombre de San Bosco, continuando en sentido norte el
callejón José Gregorio Hernández, calle San
Bosco Nº 2, calle San Bosco Nº 3 y el callejón
Rayo de Luz que toma el nombre del abasto de mismo nombre que
estableció en la esquina con Av. Los médanos el Sr.
Jesús Sánchez. De allí a la orilla del monte
solo había un peladar.
Por
razones históricas Creo que nuestro barrio debe recuperar su
topónimo inicial de San Juan Bosco ya que la identificación
de Concordia nada tiene que ver con las raíces histórica
y cultural de la comunidad, por cuanto dicho nombre se origina del
Bar Restauran Concordia que estableciera diagonal al redondel hoy
Residencias Maiolino, el Señor Pache Leal.
El
autor de este aborto social, sin culpa alguna, fue el amigo Máximo
Fornerino, él mismo me contó como había
sucedido todo. Él presentó a la alcaldía un
proyecto para oficializar el nombre de su sector llamado Concordia,
como una unidad social independiente del Barrio San Bosco, así
se llamaba nuestro sector. El resultado de su solicitud, por
ignorancia de las autoridades trajo como resultado que nos
desaparecieran a nosotros, uniendo dos sectores totalmente distintos
uno de otro, en un solo sector que recibió el nombre de
Concordia. Desapareciendo así nuestra identidad sociopolítica
que habíamos adquirido desde 1943.
De
modo que quienes cometieron la torpeza de sustituir el nombre de San
Juan Bosco por el nombre de un bar llamado Concordia nos golpearon el
alma, nos despersonalizaron socialmente al arrancarnos la fuente
primaria de un pueblo, como es el nombre, que da el
carácter de lo que somos, es decir la identidad. Ese sentido
de pertenencia que se había desarrollado en el entorno
comunitario como consecuencia del la pastoral social de la iglesia
inicialmente emprendida por el Padre Mario Rota y que posteriormente
continuaron los Salesiano hasta el presente, fue tirado de un plumazo
al cesto de la basura de la historia.
En
ese sentido muchos de los que nos levantamos en el Barrio San Bosco
jamás podríamos tener algún sentido de
pertenencia con algo que es ajeno a nuestra idiosincrasia. Concordia
para nosotros no existía, ¿Cómo podría
uno sentirse identificado con algo que no existe?
Los
que vivimos desde Av. Josefa Camejo hasta la Calle Virginia Gil de
Hermoso, sencillamente no nos sentimos ni nos sentiremos jamás
identificado con concordia
Esto
es algo insólito dos sectores que no existían le
quitaron el nombre a la única parte ya poblada de nuestra
comunidad
Hoy
lleva el nombre de San Bosco lo que siempre fue un pedazo de calle,
desde la Capilla hasta la Av. Independencia
En
resumen la plaza jamás tuvo nombre oficial hasta el momento en
que fue bautizada recientemente con el nombre de Josefa Camejo.
MANCHE LUGO
Las
familia Lugo Guerrero y siempre estuvo insertadas en el proceso y
desarrollo cultural de nuestra comunidad. Participaron en esas
actividades culturales de entonces por parte de los Lugo Guerrero,
Celio, Erasmo, Juan, Héctor y Leonti. Grandes colaboradores
fueron todos en las actividades de la iglesia, pero la labor de mayor
relevancia la realizó Germán, mejor conocido como
Manche. Manche Lugo fue un consecuente animador de las misas de
aguinaldos a quiénes los problemas de salud y las
limitaciones físicas nunca le impidieron estar allí
en cada temporada navideña. Fue sin duda una bella persona muy
querido y apreciado por quienes le conocimos, nunca olvidaremos sus
sonoras carcajadas y su amable sonrisa. En estos tiempos,
cuando alguien se esfuerza y entrega el alma por una causa decimos
ese tipo es echado para adelante con su responsabilidad. Así
era Manche Lugo con las misas de aguinaldos, siempre estaba al pie
del cañón. Pero además en su juventud fue
catequista y participo en el equipo de ciclismo que fundara el padre
Chiampitti y también fue alumno de la escuela de música
que tenían los salesianos en la capilla. Además fue un
connotado legionario pues participó en el Presidium Regina
Apostolurum en el año 1956.
Manche
se desempeño como músico en la banda del Batalló
Mariscal Falcón, Después estuvo con la banda del
Estado. En el campo privado tocó en la Orquesta Sensación,
El Combo Venezuela, la banda Latín Power. y el Dasaguarare.
Manche fue un gran arreglista.
JOSÉ
FANEITE
El
Profesor José Faneite a quienes sus íntimos amigos
le llaman Chavel es todo un personaje de nuestra comunidad, un
libro viviente excepcional que guarda en su alma un montón
de vivencias que de no haber sido entrevistado oportunamente
quizás toda esa información que nos ha comunicado se
hubiera perdido para siempre.
Chavel
nació para ser líder es en el ámbito de la
comunidad eclesial impulsada por los Salesianos, donde aquel
imberbe jovencito comenzó a pulirse y demostrar su
talento como dirigente social de la comunidad.
Chavel fue muy allegado al P. Mario Chiampitti y al padre Guillermo Parra. Por esa estrecha amistad y por esa confianza que Chiampitti depositó en él, el resto de la muchachada lo llamaban el hijo del padre Chiampitti. Allí regaba una huerta que tenía Mons. Iturriza al fondo de la capilla donde después se construiría la Escuela Técnica Francisco de Miranda. Seis bolívares le pagaba el Obispo por aquel pequeño trabajo. Allí estudio su tercer grado e hizo dos años de teoría y solfeo, así alternaba sus estudio con su trabajo apostólico en la catequesis para la cual se preparó haciendo talleres y retiros en caracas bajo la tutela por supuesto de los salesianos. Pero Chavel no solo se ocupaba de cultivar el espíritu también dedicaba tiempo al deporte siendo junto a Ismael Rosillo, Francisco Vargas y Manche Lugo destacados ciclistas de la ciudad. El deseo de superación de Chavel es quizás su característica más importante. Este joven que estaba decidido a ser alguien en la vida, encontró entre la Iglesia el punto de apoyo para hacer realidad su sueño a través del estudio. Para seguir adelante en los estudios recibió el apoyo incondicional de su Hermano Rubén hasta convertirse en un excelente docentes que supo servirle a la sociedad con responsabilidad y honestidad. |
YBRAHIN
LEAL
El
grupo Ritmo infantil que fundara el padre Mario Chiampitti y en
el que participara Ybrahin estaba formado por niños de 9 a 14
años. Esta agrupación hacia su presentación de
siete a nueve de la noche en Radio Coro, en el programa Campanadas
que animaban tanto el propio P. Chiampitti junto a Luisa
Lugo, pantanera muy querida, quien además es parte de nuestra
historia por haber sido junto a Petrica su hermana, primeras
cantantes en las misa de aguinaldos de nuestra comunidad
cristiana.
Ybrahin
es uno de los primeros promotores de la Gaita en El Pantano cuando a
mediado de los 60 funda Los Gaiteros de Falcón, agrupación
que estaba compuesta por 21 integrantes siendo la mayoría de
Bobare. De este Grupo, Además de Ybrahin era también
compusieron gaitas para la agrupación Manuel Salvador
Crístian, Ramón Gotopo, Manche Hernández, Felipe
Blanco, Yiyo Fuguet. Muchos fueron los reconocimientos y éxitos
logrados por la agrupación gaitera hasta su desaparición,
para dar paso a Los Turpiales del éxito y al Blasón
Gaitero. Posteriormente Ybrahin, que para nada le gustaba dormirse en
los laureles regresa con más entusiasmo en el año 63 y
organiza junto a Pablo Hernández una pequeña agrupación
para animar la navidad, tocando entre amigos y en las emisoras Radio
Coro y Onda de los Médanos.
Fueron
integrantes de este conjunto en otros Emilio Tellería,
cuatrista. Jesús Molina, Tambora. Ramón Molina,
Charrasca. Era solistas en la agrupación Felícita
Molina y en el coro Carmen Santeliz y Rosa Molina. Ybrahin también
formo parte de otras agrupaciones Como “Canelita y sus Muchachos,
Pedro y su Ritmo y otro grupo llamado los
Indaxixo
LA
CALLE MIRANDA
Autor:
Ybrahin Leal
Esta
es la Calle Miranda
Que
está en malas condiciones
Y
sus habitantes piden
Que
cuando se la componen
Esta
es la Calle Miranda
No
su puede transitar
Porque
existen unos huecos
Que
un muerto se puede enterrar
Al
señor gobernador
Yo
le vengo a recordar
Y
sabiendo que ahí existe
Una Escuela de
Normal
IBRAHIN LEAL
Gaiteros
de Falcón
CENTRO
CÍVICO DEL PANTANO ARRIBA
EN
EL BARRIO SAN BOSCO
El
Centro Cívico de Pantano Arriba fue la primera institución
oficial construida en el sector para la promoción de la
cultura y el deporte durante la gestión Del gobernador Pedro
Bracho Navarrete. Fue inaugurado el 26 de Julio de 1.963. Esta
instalación contaba con una biblioteca que llevaba el nombre
de Rafael Sánchez López y una cancha de Básquetbol
rústicamente asfaltada. Otros centros similares fueron
construidos en Pantano Abajo, Curazaito y Bobare. Estas fueron las
primeras instituciones culturales que la naciente democracia
construyó en los más populoso barrios de Coro,
lográndose a través estas instalaciones, un maravilloso
proceso de socialización e interconexión por medio de
la cultura y el deporte con la comunidad organizada de estos
sectores.
El
Centro Cívico, en principio inicia sus actividades
educativas y culturales con el servicio de la biblioteca, a la
cual acudían los jóvenes a consultar los textos. En
este mismo ambiente de usos múltiples, funcionaba una Escuela
de arte y Oficio dependiente de la Gobernación. Otra
función del Centro muy importante estaba relacionada con la
seguridad y el orden Público, ya que en el mismo tenía
su sede la comisaría de vigilancia policial. En dicha
instalación también funcionaba una especie de lavandero
popular
El
Centro es relanzado en un segundo impulso cuando el mismo pasa a
depender de La Sociedad Amigos de Coro, que presidía el
Presidente de la empresa CADAFE, un Señor de Apellido Ramos.
Esta Institución hoy desparecida es la que promueve la
formalidad de la organización y participación
protagónica de la comunidad por medio del liderazgo
representativo, surgido de una elección popular que dio origen
a la primera Junta directiva del Centro Cívico, cuya
presidencia recae en la persona de Melquíades Jordán.
A partir de ese momento el Centro Cívico comienza a ser
identificado con el epónimo Rafael Sánchez López.
Gracias
al aporte de esta institución y a la creatividad de los
cuerpos directivos que estuvieron al frente de su administración,
es que se pudo desarrollar por mucho tiempo toda una gama de
actividades en pro del desarrollo social, cultural y deportivo, que
indudablemente contribuyeron a mejorar la calidad de vida, no solo de
los habitantes del sector, también se beneficiaron muchas
personas de los sectores adyacentes con los distintos programas
educativos implementados por los órganos directivos.
Los
Presidentes de dicha institución fueron Melquíades
Jordán, Salvador Cristian, Omar Caldera, y Francisco Colina.
Otros directivos fueron Julio Guanipa, Vladimiro y Ginel
García, Francisco Colina, Saúl Ollarves, Tolito y Cruz
Guerrero, Francisco Maury, Enni Arcila y Amelia Ocando, entre otros.
La
escuela de Arte y Oficio que hemos mencionado fue dirigida por la
señora Aura de Mora. La escuela de mecanografía y
prácticas de oficina la inició Francisco Colina, en la
cual se formaron las hermanas Noria y Alída Tellería,
discípulas que posteriormente asumieron la dirección de
la Escuela, ejerciendo además el oficio de facilitadoras. La
escuela de Mecanografía se creó con maquinas donada por
la Compañía Creole Corporation de Venezuela con sede en
Judibana.
El
primer promotor deportivo que inicia actividades en la cancha del
centro fue el Profesor Teófilo Miquilena, el cual acudía
por las tardes a impartir sus enseñanzas de básquetbol
a los jóvenes de la comunidad.
La
gestión financiera implementada por los directivos para la
obtención de recursos se lograba por medio de fiestas pro
fondos, bingos, la colaboración espontánea de los
socios de 2 bolívares semanales, y la erogación de los
alumnos de la escuela de Mecanografía que pagaban 5 bolívares
semanales. Con estos recursos administrados con absoluta
transparencia y eficiencia se mantuvo operativo en el Centro
por muchos años. Un verdadero ejemplo de lo que es la
participación autogestionaria ocurrida hace treinta y tres
años. Desde entonces no ha ocurrido otra experiencia de
participación que se le parezca.
En
este Centro se realizaron grandes fiestas para el disfrute de la
colectividad, muchos fueron los grupos musicales que pasaron por su
escenario. Billos Coro Boys, Billito y su Combo, Sonora Tropical de
La Vela, Cheo Pimentel y su Combo, Canelita y sus muchachos Pedro y
su Ritmo, King Melody de Joseito Medina la cual integraban Rito
Barrera, Diógenes González Oscar Navarro (Baba) y
Tolito Guerrero.
Entre
esas grandes fiestas que se realizaban en el Centro Cívico
fueron inolvidables las de Carnaval, donde se coronaron Yolandita
Sánchez, Amelia Ocando, Marlene Arteaga, Gladis Méndez,
Astrid Pérez, Edith Camacho, Nancy Guardia y Marlene Lou y
María Chávez entre otras
En
este centro inicio Omar Caldera un experimento Gaitero con el Grupo
de Ybrahin Leal, Los Gaiteros de Falcón el cual promociona,
representa y promueve con el nombre de Sensación Gaitera en el
concurso de gaitas dirigido por Raúl Rojas Partidas en Radio
Coro. Los instrumentos fueron donados por el Dr. Veliz director de
educación en el Gobierno de Ramón Antonio Medina.
Los
Turpiales del Éxito que habían nacido en la casa de la
familia guerrero, por los tres platos también hizo del
Centro, su sitio de para desarrollar sus actividades artísticas.
La
agrupación la integraban por Manuel Salvador Cristian,
director artístico Tolito y Cruz Guerrero, Cristóbal
Chirinos, Edgar González, Francisco Maury, Vladimiro, Ginel
García, Ildemaro Pontiles, Carlos y Luís Medina, Alí
Chirinos, Alexis Sánchez, Perucho Acosta, Enni Arcila, Ramón
y Rolando Gómez, Virgilio Sangronis, Hernán Blanco,
Edixon Pirela el maracucho y Justiniano conocido como Tiroteo,
cuatrista del grupo
Dos
bolívares cobraba Vitelio Nava por cada integrante para
llevarlos a la radio. Las empresas que promocionaban el grupo eran
Sastrería la Época, Reencauchadora Revenca y la
Embotellador Pepsi Cola. Este grupo de gaitero participó en
muchas fiestas, eventos culturales y hasta políticos a cambio
de una buena mesa servida, también hicieron presentaciones en
Valencia y en los estudios de de Televisión Canal 5,
Todo por amor al arte. Entre los conjuntos de aquel entonces Sonaban
Literal Club, Manaumara, Venegait, Estudiantes de La Vela, Los
Gaiteros de Falcón y Blasón Gaitero entre otros
Al
final de la década de los 70, el Centro había caído
en un estado de abandono con la emigración de los líderes
en busca de otros horizontes. Por un tiempo El Señor Cesar
Maduro, a través de la institución que dirigía
Prevención del Delito, intento rescatar las deterioradas
instalaciones, pero nunca tuvo apoyo oficial para echar adelante sus
buenos proyectos. Durante la administración de Carlos Andrés
Pérez estuvo hasta el presente bajo la tutela del INCUDEF,
cuyos gerentes crearon la figura del promotor deportivo, que fue más
bien un operador político que respondía a los intereses
del partido de turno.
Durante
mi Gestión como presidente de la Junta de Vecinos, la cual
asumí por renuncia de la primera presidenta Egleida
Coromoto Chirinos, logramos que el doctor Pedro Acosta, concejal
de la municipalidad durante la gestión de Arnaldo Curiel
Penso, se techara el auditorio y se reconstruyera la cancha de
básquetbol. También hicimos la segunda cancha de bolas.
Posteriormente siendo presidenta de la Junta de Vecinos, la Señora
Julia Martínez durante la gestión de Popo Barraez, y
con el apoyo una vez más del Dr. Pedro Acosta, elegido
nuevamente concejal, se construye una nueva cancha de bolas
techada. La revolución después de 10 años
no ha puesto un bloque. Hasta el presente solo hemos visto pan y
circo
La
historia del Centro Cívico de Pantano Arriba es una época
inolvidable para todos los habitantes de esta localidad
posteriormente llamada Barrio San Bosco, el cual en mi opinión,
es el epónimo más autentico y el que realmente le
corresponde por cuanto la esencia de su fundación se remite a
la obra social, cultural y deportiva que la comunidad salesiana
desarrolla en nuestro sector por más de sesenta y siete años,
actividad que constituye la fuerza generadora del carácter y
la personalidad del pueblo que no es otra cosa que la conciencia
espiritual arraigada en los valores que nos identifican como
colectivo.
OMAR
CALDERA POLANCO
Hernan
Blanco.
EL
MÁS IMPORTANTE LIDER JUVENIL, DEL PEQUEÑO MUNDO SOCIAL
DE PANTANO ARRIBA Y SAN BOSCO
Omar
Caldera nace en Pantano Arriba en el callejón Riera, el 18 de
octubre de 1945. Fueron sus padres, Pedro Caldera y Carmen Polanco
Eizaga. Los Caldera proceden de Moruy, lugar donde nace Armengol
Caldera abuelo de Omar, el cual formó familia en Píritu
a raíz de haberse establecido en esa población como
autoridad civil, en la cual contrajo nupcias con la Señora
Zoila Cariel. Omar pasa los primeros años de su infancia en
Punta Cardón en la Península de Paraguaná,
debido a que su padre Pedro Caldera laboraba en la empresa Petrolera.
En esa localidad estuvo ligado a la iglesia a través de Los
Hermanos Maristas, donde participa en los asuntos de la iglesia como
monaguillo y del movimiento de Scout que fundara en Punto Fijo un
sacerdote de esa comunidad.
Cuando
los esposos Caldera deciden finalmente fijar su residencia en Coro,
Omar cuenta con doce años de edad. Sus estudios en esta ciudad
los inicia en la Escuela José Ladislao Andára.
Posteriormente estudia en la Lucrecia de Guardia. En esta escuela
comienza la vida contestataria de Omar, en unos carnavales, cuando
organiza con un grupo de alumnos una protesta en contra de un grupo
de maestras, que por parcializarse con unas de las candidatas habían
defraudado la voluntad de la mayoría. De esta institución
Omar fue trasladado al Grupo Juan Crisóstomo Falcón,
donde conoce a los amigos de toda la vida, William y Henry Hurtado,
por cuyo intermedio se vincula a otros dos hermanos de
estos, Alcides y Omar, dirigentes del Partido Comunista. Con esta
familia de comunistas inicia Omar Caldera una ascendente y
protagónica carrera política que lo lleva a convertirse
en dirigente juvenil de la parroquia San Gabriel, en cuyas
comunidades desarrolla una intensa actividad social, cultural y
deportiva, específicamente en El Pantano, Bobare y San Bosco.
En estas comunidades Omar despliega una gran actividad deportiva y
cultural cuya única finalidad era captar jóvenes, para
fortalecer los cuadros organizativos del P.C.V. Entre esa juventud
que acompañan a Omar estaba, Iginio Sibada, Reinaldo Rivero,
Vladimiro García, Efraín Morillo, y Romer Martínez,
los hermanos Vargas entre otros. De las actividades sociales y
culturales Omar y su grupo de adeptos pasaron a realizar actividades
políticas más intensas de formación ideológica
y entrenamiento de tipo militar, manejo de explosivos y armamentos
para incursionar en eventos de confrontación con los gobiernos
anticomunistas de A.D. Y COPEI. Estas actividades le llevan
convertirse en un perseguido político de los cuerpos de
seguridad del Estado, razón por la cual en muchas ocasiones es
privado de su libertad, para ser sometido a los represivos tratos a
que eran sometidos los enemigos del gobierno en los calabozos de
dichos cuerpos policiales. Después de causar bastante
sufrimiento al núcleo familiar, sus padres deciden enviarlo a
Puerto Cabello a continuar estudios de bachillerato los cuales
interrumpe debido al fallecimiento de su madre. Durante su estadía
en este lugar Omar presencia el famoso golpe militar denominado el
porteñazo.
A
su regreso a Coro, ya más calmado de esa efervescencia anti
adeca y anticopeyana que le caracterizaba, incursiona en una
oposición más Light representada por Arturo Uslar
Pietri y posteriormente al frente de la victoria que aglutinaba a
todos los partidos de la oposición cuyo candidato era Miguel
Burelis Rivas.
Omar
alternaba la actividad política, con la práctica de la
actividad comercial, empresarial y deportiva. En cualquier evento
social de carácter público o privado, él se
desenvolvía con gran habilidad e ingenio creativo en la
consecución de sus objetivos. El valor, la firmeza y el
cálculo frío, hacen de Omar un hombre optimista que no
se arredra ante los retos ni teme el fracaso.
En
el campo laboral incursiona en la Administración Pública,
en la dirección de salud del Estado en un cargo que le
ofreciera el Dr. Rubén Padilla Fuguet como Kardista, en el
cual no duro 15 días.
Siendo
aun menor de edad, incursiona en el mercado laboral independiente
como vendedor de la empresa Singer, bajo la tutela de un Señor
de apellido Cova donde se destaca como vendedor estrella de dicha
empresa, de la cual recibe la confianza para asumir responsabilidades
mayores en la ventas, como vendedor independiente, facultado para
tener vendedores bajo su responsabilidad. De esa forma se abre camino
en otras experiencias con Creditina, una empresa que ofertaba prendas
y relojes a crédito.
Omar
también incursionó en la Radio, haciendo pequeñas
intervenciones en el micrófono al lado de ese icono de la
radiodifusión como lo fue Gonzalo Márquez Yánez,
también se desempeño como publicista, además
hizo su pasantía en el Diario La Mañana, con su columna
Mirador Deportivo en la cual se identificaba como Terry Caldera.
En
ese tiempo estaban muy en boga los concursos de Gaitas que dirigían
Raúl Rojas Partidas y Cecilio Antonio Nava en Radio Coro. Este
evento motivo a Omar para fundar un conjunto de gaitas junto a
Ibrahim Leal, el cual bautizaron como Sensación Gaitera. El
dinero con el cual se compraron los instrumentos en Maracaibo, fueron
una donación de la Dirección de Educación de
Estado durante la gestión de Ramón Antonio Medina. Era
entonces director de educación el Dr. Veliz. Los ensayos se
realizaban en el Centro Cívico del Barrio San Bosco, antiguo
Pantano Arriba.
Ya
hemos dicho que cualquier cosa que a Omar se le encomendara lo hacía
y muy bien, así participo en cualquier tipo de manifestación,
protesta, huelgas de hambre en procura de reivindicaciones sociales,
culturales y deportivas. Fue por medio de una huelga de hambre junto
a los ciclistas Henry García y Ángel Arcila entre
otros, apoyados por el Padre José Verdechia que consiguen la
destitución de Doménico Zaza, al cual sustituye en
cargo de la Dirección de Ciclismo del Estado. También
fue miembro de la asociación de Boxeo. Como atleta Omar
participó en las disciplina de Fútbol, Basket y
atletismo, destacándose más en el futbol, en aquellos
encuentros que se realizaba entre las instituciones de Educación
Media y Técnica, tales como Liceo Cecilio Acosta, Escuela
Normal José Mercedes Santelíz y la Escuela Técnica
Industrial Francisco de Miranda. En esos eventos participaban entre
otros Bladimiro y Ginel García, Siete Macho, Néstor
Yarit, Felipe Beuvrint, Chiche Leañez, Pedro Colina. En una
ocasión en que se jugaba una final en el Estadium Municipal de
Coro, se armó una trifulca en la que tuvo que intervenir la
Guardia Nacional para poner orden, de la cual salieron los
futbolistas con los trofeos en las nalgas debido a los peinillazos.
Omar,
tituló en su columna de La Mañana “La Tercera Oncena
deshonra su divisa”
Como
promotor de festividades se le podía ver en una feria en
cualquier pueblo o ciudad, una fiesta patronal, en un certamen de
belleza, un carnaval o un evento deportivo en el barrio y allí
estaba Omar organizando y haciendo negocios, como representante de
artistas y grupos musicales a través de su empresa Promociones
Manaure. Desde la década del 60 estuvo organizando con gran
éxito los carnavales en distintos sectores de nuestra ciudad,
tales como Bobare, Chimpire, Pantano Arriba, Pantano Centro y San
Bosco
Omar
es fundador de Asociación de Boy Scouts en el municipio
Miranda
El
más importante cargo privado lo ejerció como Gerente de
la Empresa Cervecera Regional.
En
el año 1972 ingresa a las filas de COPEI, donde demuestra en
muy poco tiempo su capacidad para gerencial los asuntos de la
política. Como miembro de esta organización participa
en la administración pública, como Fiscal Auxiliar del
Consejo Supremo Electoral, Director General de la DIEX, Coordinador
Rural de Cedulación y Comisionado del Gobernador José
Valery Salvatierra.
Origen
del Apellido Caldera.
En
el Siglo XVII vino a Coro, el Capitán Andrés Caldera,
natural de la Isla de San Miguel de Portugal, cuyos padres había
sido Pedro Caldera y Águeda Rodríguez. Pedro Caldera
era oriundo de Salamanca.
El
Capitán Caldera, estaba casado con Luisa González de
Quiñónez, hija del Capitán Juan de Quiñónez
y Ana de Quiñónez.
Los
Esposos Calderas González llegaron a Coro procedentes de
Curazao para mitigar la pena de haber perdido una hija. Estos
adquieren unas tierras en Comodore donde se dedican a la agricultura.
Sus hijos fueron Nicolás, Juan, Jacinto, Manuel José,
Ursula y María. Los dos primeros fueron presbíteros.
LAS
HERMANAS TOVAR LOS PALENCIA Y LA CALLE DUVISI
El
camino más importante de entrada a la ciudad por el norte fue
conocido como el camino de los paraguaneros o Av. Paraguana, ya
que por esa vía entraban y salían los arrieros que
venían de la península, los cuales se dirigían
descargar su mercancía en por los alrededores de El
Chupulún, centro del quehacer económico de entonces.
Donde se cruzaba el camino de Los Paraguaneros con la calle Josefa
Camejo se residenció la Sra. Concepción Flores de
Palencia con sus hijos artistas. Un día, en uno de esos
habituales recorridos que las hermanas Tovar, Séfora y Virita
hacían por toda la ciudad, ejerciendo su oficio de visitadoras
sociales y promotoras de salud, se aparecieron por el pantano
visitando los hogares del sector para realizar una campaña
sanitaria. En cada casa que llegaban iban preguntando por el nombre
de la calle, en algunas partes les respondían que Av.
Paraguaná y en otras les decían que el
nombre era El Camino de los Paragauneros. Cuando
llegan a la casa de los Palencia Flores, las hermanas descubren a los
famosos niños músicos del conjunto Duvisi de los cuales
se hablaba por todas partes por el talento mostrado en sus constantes
presentaciones radiales. Aquellos muchachos impresionaron de tal
manera a Séfora y a Virita que de allí en
adelante fueron registrando en sus fichas de control, Calle Duvisí.
A ella se le debe pues el nombre de la calle principal de nuestro
barrio.
EL
BEISBOL DE SAN BOSCO
Cuando
ya estaba en decadencia lo que yo llamo la gran liga corianas, en el
llano de San Bosco se estaba levantando una camada de jóvenes
peloteros dispuestos a imprimirles nuevos bríos a la actividad
peloteril e inyectarles nueva sangre a los equipos emergentes.
Entre
aquella muchachera que acudía a San Bosco jugar béisbol
con los implementos que por supuesto había traído el
padre Chaiampitti, Estaban entre otros Saúl Colina, Cayo
Hernández, Pedro Garcés Omar García, Luís
Salas, Domingo Díaz, Francisco Acurero, Rafael Ramones,
Gustavo Hernández, Francisco Dávila, Hipólito
Garcés, Pedro Trasmonte, Tito Leen, Douglas Penso, Néstor
Yarí, Andrés Bracho, Domingo Oviedo(escalera), José
Dolores Díaz, le llamaban unos Yoyo y otros Chanquilón,
Mundo Colina, Chindo Zavala, Manenche Rosillo, Manuel Arías,
Higinio y Alberto Sibada, Julio y Carlos Castillo, Arcadio Sangronis,
Candido Peña, Castor y Reinaldo Ugarte, y Hernán
Colina, entre los más Jóvenes estaban Hidemaro
Pontiles, Carlito García, Miguel, Dionisio Carrasquero, Héctor
Arguellos, Julio Garcés, Jesús, Francisco y Reinaldo
Ávila, Coromoto y Amador Dávila, Víctor
González, entre estos jóvenes venían muchos de
Pantano Centro.
Es
importante resaltar que en este campo de juego se practicaba béisbol
en varias categorías, “A”, Juvenil, e infantil. Algunos de
ellos representaron dignamente a Falcón en varios campeonatos
nacionales. Una gran estrella de este béisbol pantanero y
sanbosquense fue manenche Rosillo, quien se inició desde niño
en el llano de La Rochela.
El
Primer equipo donde participa Manenche se llamaba “Cuba” siendo
su organizador Henry Jansen, el Manager fue José dolores Díaz
(Chanquilón) Por cierto que el apodo de Chanquilon le fue dado
por su parecido físico con un famoso pelotero mejicano apodado
Chanquilon. Las franelas para el equipo fueron compradas en una
tienda de los D`Limas a un costo de real y medio y las gorras
fue donación de la Ferretería Cruz, de Monche Soto. Fue
un campeonato de varias categorías en homenaje a Víctor
Fuguet. Los equipos que participaron en ese entonces fueron La Vela,
Liceo Cecilio Acosta, Cumarebo, La Polar de Punto Fijo y Pantano
Abajo. La anécdota de este evento, según Manenche fue
que casi salieron desnudos porque en el primer swing o lanzamiento de
los peloteros, las franelas se despedazaban. Culpable de esta
situación fue el propio Henry ya que por ponerle al equipo el
nombre de Cuba, despreció las franelas que le ofrecía
su tío, Ubaldo Jansen, dueño de la “Sastrería
Jansen” quien tan solo exigía que el equipo llevara el
nombre de la sastrería, pero Henry ya había
decidido que ese era el nombre y no hubo manera de hacerlo cambiar de
opinión.
CHUA,
TEODORO, TEOFILO Y CAYO
Teófilo
fue uno de eso muchachos que se hizo peloteros en las caimaneras que
por los alrededores del aeropuerto, niños y adolescentes del
barrio organizaban espontáneamente. En estos pequeños
grupos carente de entrenador y dirigentes aquella muchachada pulía
y desarrollaba sus habilidades con las aspiraciones de jugar en los
equipos grandes. De ese semillero de peloteros de El Pantano surgió
Teófilo, para jugar como era su sueño en las grandes
ligas de Falcón. En los equipos de San Bosco, Seguridad
Nacional, Olimpia, CADAFE, Punto. Fijo, La Rochela, Texco Campo Elías
y otros.
Teófilo
jugó con peloteros de un alto nivel como Víctor
Davalillo, Urbano Lugo, Tata Amaya, José Croquer, José
Ramón Higuera, Juan Ramón Quero (cumarebito) y mi
primo Emilio Ratón Vargas hijo de Francisco Tellería.
Los
peloteros profesionales que venía a jugar en Coro y Punto Fijo
los dueños de equipos les pagaban 600 bolívares
mensuales. Teófilo con el último equipo que jugó,
el Campo Elías, le pagaban 300 bolívares. Por sus
servicios al equipo Texco, trabajó en la Shell y en la
Creole en Punto Fijo.
La
fiebre del béisbol el aquel tiempo era tan grande que los
pantaneros viajaban a cualquier parte para hacer sus desafíos
beisbolísticos. Además de jugar en todos los llanos de
Coro y la Vela también se iban a Paraguaná a los llanos
de Miraca Maquigua Maitiruma, Santa Ana. Donde estaban las buenas
apuestas allí estaban los pantaneros con su mejor selección.
El transporte del equipo era un camión
internacional de Prisciliano, cuando el viaje era largo. Cuando los
juegos eran en Coro, los transportaba Ali Hidalgo en su pequeño
camión Ford.
GENTE DEL BARRIO
Una
anécdota de Teófilo que considero importante reseñar
aquí tiene que ver con el béisbol las apuestas y las
carreras de caballos. En aquellas caimaneras de béisbol que se
hacían en la década del 50 y 60 entre los peloteros del
pantano es necesario hacer mención de aquellos comerciantes de
la localidad que invertían en cada juego de cuerdo a como se
conformaban los equipos. Los mismos peloteros hacían sus
pequeñas inversiones. Esos financistas y los hemos
mencionados, Facho, Alí, Prisciliano eran algunos de esos
personajes.
En
una ocasión Alí Hidalgo le encomendó a Teófilo
hacer una apuesta de cinco bolívares en uno de esos tantos
juegos y este tuvo la suerte de ganarse 25 bolívares, por lo
que recibió de Alí cinco bolívares de regalo.
Con este dinero selló un cuadrito del 5 y 6, juego de las
carreras de caballos muy popular en la época. El domingo por
la tarde Teófilo se fue a escuchar las carreras en el único
sitio de la comunidad donde había un radio, en la casa de
Benigno Perozo, un potente radio de marca alemana TELEFUNKEN. Para
sorpresa de Teófilo, los 6 caballos que la tarde anterior
había marcado en el cuadrito, salieron vencedores ganándose
ese domingo 8.000 bolívares con los cuales comenzó a
construir su actual casa de habitación.
Pero
antes de ser pelotero el hijo de Asunción Valdez y Bartolo
Garcés, primero tuvo que hacerse hombre a juro porque la vida
así lo exigía. La familia pantanera tenía que
hacer de tripa corazón para poder salir adelante. Teófilo
además de realizar los oficios de la casa como buscar el agua
moler el maíz cortar el pasto para el burro de la casa,
también lo cortaba para vender, vendió datos,
leña; también vendió agua en Maracaibo en un
burro, trabajo como albañil, en una carretilla bastante arena
cargó para despejar la carretera Coro-Punto Fijo por tan solo
5 bolívares diarios. En una pasantía que hizo en el
INOS tenía que ir hasta Siburua, San Antonio y Meachiche en
bicicleta a bombear agua para las petroleras, No había
sido construida todavía la represa El Isiro, cuando al fin
gracias al béisbol, pudo conseguir un cargo fijo en el INOS,
tuvo que echar coleto del bueno con un sueldo de 12 bolívares
diarios hasta escalar un alto puesto al frente del
gremio de los
trabajadores.
Un
personajes muy queridos y siempre recordado en nuestra comunidad fue
Chuchoines el cual se llamó realmente José de Jesús
Petit, hijo de José Inés Petit y María de Jesús
Leones de Petit. José Inés era oriundo de Guacuira
Arriba y María de Jesús era de El Suruy, pueblo cercano
a Churuguara municipio Federación. Estos esposos criaron
además a José Vicente Pitit(Chente), Antonio José
Petit (Buché), Julio Catalino Petit y a Josefa Petit (Chepa).
José
de Jesús Petit mejor conocido como Chuchoines se unió a
la señora Cándida Faneite, quien ya tenía
tres hijos de uniones anteriores los cuales eran Rubén, José
Vicente y Anselmo. De esta unión nacieron Clarita, Carmen y
Olga.
José
Inés y su hijo Chucho eran especialistas en construir casas de
bahareque, y adobes. Como en ese tiempo se usaba mucho la letrina,
Chucho también se ocupaba en la construcción de ese
tipo de huecos. Chuchoines eran un personaje muy simpático y
amable al que siempre recordaremos con mucho cariño en nuestro
barrio San Bosco y muy particularmente en el callejón José
Gregorio Hernández.
JUAN
HURTADO
Juan
es prácticamente uno de los primeros niño nacido en
nuestro barrio junto a sus hermanas Francisca y Gregoria, vino al
mundo un 24 de junio de 1925. Eran sus padres Estefana Valdez y
Bernal Hurtado. Juan es el más importante personaje de la
comunidad en lo que a conocimiento del sector se refiere ya que él
proviene de esas primeras familias de Paraguaná, que se
instalaron en las tierras baldías del pantano, y que después
sería conocida como San Bosco. El es uno de mis mejores
colaboradores para la reconstrucción de esta historia por ser
una de las pocas personas que vieron el nacimiento y
desarrolló nuestra comunidad
En
principio como todos los niños del Barrio, Juan se ocupaba en
los oficios de la casa, cortar leña para el fogón,
pasto para el burro de la familia que era el medio de transporte,
con que la gente contaba para sus quehaceres. Ya más crecidito
aproximándose a la madurez de edad se dedicaba a vender leña,
datos, cagajón pilado, hierba y cardón, materia prima
muy solicitada para la construcción de viviendas. Después
se dedicó a hacer adobes en el Tanque de los Díaz.
Fue así como poco a poco se dedicó al trabajo de la
construcción casas, con su cuñado Pausalino Zea, su
gran maestro, con quien aprendió el oficio de la albañilería.
Estos personajes Pausalino y Juan participaron en la construcción
de las más importantes obras que se hicieron en Coro, tales
como el parque de El indio Manaure, El servicio Lara, Estación
de Servicio Médanos entre otros.
La
granja de del General Jurado que he mencionado era la residencia
oficial del gobernador. Juan cuenta que era un sitio paradisíaco
con muchos árboles y lagunas donde había mucha variedad
de patos. En esta granja, Juan jugaba con un hijo de Jurado que
llamaban el sordo, allí se divertía sacando peces de
las laguna, de vez en cuando también recogía huevos de
patos, ya que habían muchos
ANTOLINO GUERRERO
Antolino
Guerrero También tuvo una bodega en nuestro barrio, la misma
estaba ubicada en el camino de los paraguaneros o Av. Paraguaná
como llamaban anteriormente a la calle Duvisí, entre la casa
de Carmen Amaya y Angelina Ávila. Este prospero comerciante
nacido en La Chapa al igual que su esposa Simona Quero formó
casi toda su familia en nuestro Barrio en la década del
cuarenta. Junto a la bodega tenía Antolino un Bolo que
era el sitio de diversión de la comunidad fue por cierto
el primer sitio del sector donde se vendió cerveza por primera
vez. Para entonces contaba Antolino con una pequeña planta
eléctrica con la cual les suministraba energía
eléctrica a algunos vecinos por una módica suma de
dinero. De la planta de Antolino obtenía electricidad su
compadre Aquiles Mujica. En ese sitio tenía Antolino tenía
una Corneta amarrada en un palo con la cual deleitaba al vecindario a
través de las hondas hertzianas de Radio Coro. A la hora de la
novela muchos se acercaban al negocio de Antolino para escuchar las
novelas radiales de entonces. De allí mudó la bodega
para la esquina donde actualmente vive la familia de Ana Castellano.
Varias casas de ese sector fueron propiedad de Antolino las cuales
heredó de un familiar. En este sector en el callejón
José Gregorio Hernández nacieron los hijos
mayores de Antolino, Mary Estílita, Tolito Estaban y Cruz.
Antolino
y Simona siempre estuvieron muy ligados a al acontecer parroquial a
través de la Archicofradía de María Auxiliadora
y otras organizaciones parroquiales. Simona junto a la familia Lugo
Guerrero por ser devotos de San Antonio hacían misa al Santo,
donde solían repartir, un pancito a los asistentes.
CARLOS
EUGENIO UGARTE
(Radio
Pantano)
Carlos
Eugenio Ugarte nació y se crió en la calle Miranda
entre Riera y Duvisí era hijo de Otilia Ugarte. Aprendió
a leer y a escribir de una manera muy particular, asomado a una
ventana oía y veía las enseñanzas de las por la
ventana donde enseñaban Las hermanas Morón y las Toledo
Era
un artista panadero, los panaderos de entonces hacían obras de
artes con la harina, cualquier figura que un cliente solicitaba,
Carlos la elaboraba. Su pariente, Teresa Peña, aun recuerda un
cáliz que Carlos le regaló el día de su primera
comunión. Desde temprana edad realizó este oficio en la
panadería de, los Pelayo, además eran un hombre de
letras apasionado de la lectura, siempre estaba escribiendo versos.
Por cuestiones que nadie sabrá explicarnos Carlos Eugenio se
sumergió en el submundo del alcohol trasmutando en un locutor
genial, un comunicador de los acontecimientos que acontecían
en nuestra bucólica ciudad de Coro. Radio Pantano
recorría la ciudad con su carreterilla y su inseparable perra
Ñeña, ofreciendo su servicio de aseador, ya que
se dedicaba a limpiar solares y botar basura. Cuando se echaba los
palos se le subía el volumen y entonces no paraba de
hablar, anunciaba la hora, hacia cuñas
publicitarias, narraba las noticias, trasmitía la Hora
Católica, un programa de la iglesia que se escuchaba por Radio
Coro. Cuando estaba en ese espacio rezaba el Padre Nuestro y el Ave
María, afirmaba que era la única emisora que
trabajaba sin luz. Después se ponía a bailar hasta que
lo vencía el sueño. En cualquier esquina se echaba a
dormir. En una pequeña pieza alquilada a Miguel
Morillo vivió en la calle 2 San Bosco durante mucho
tiempo
.
Cuando estaba sobrio se convertía en escritor. Un día
decidió hacer un rancho donde llaman los pozones, entonces ya
no decía radio pantano sino radio los pozones. Cuando
rayaba los setenta años fue hallado muerto en el rancho donde
vivía. Carlos Eugenio Ugarte, es y será siempre un
inolvidable personaje de nuestra historia local
AQUILES
MUJICA
Aquiles
Mujica fue un brillante autodidacta que llegó tan lejos como
su voluntad y espíritu de superación se lo pedía.
Seguramente fueron sus padres José Andrés Mujica y
Luisa Medina quienes le enseñaron las primeras letras en
la calidez de su hogar en Miraca, lugar donde naciera en el Municipio
Falcón.
El
joven Aquiles conoció la capital en compañía de
su padre en cual se dedicaba al comercio de las famosas piezas de
arcilla que se elaboraban en la comunidad de Miraca. En este ir y
venir a de Paraguaná a Coro y de Coro Paraguaná Aquiles
le fue tomando el pulso a la actividad comercial, al punto que el
muchacho ya a los diecisiete años se lanzaba solo a hacer el
largo recorrido del desierto paraguanero con su cargamento de
Tinajas, Budares, tazas y gran variedad de adornos los cual estaban
destinada a satisfacer la demanda y exigencia de los Hermanos
D`Limas, sus habituales compradores. Realmente la operación
económica que realizaba con estos señores era más
bien una especie de trueque o cambio de una mercancía por
otra. Esta actividad llegó a su final cuando los señores
compradores le manifiestan al joven Aquiles no estar interesado en el
producto, viéndose obligado a enrumbarse con su cargamento
hacía la serranía donde terminaría colocando su
producción entre Churuguara y Santa Cruz de Bucaral. En esta
última población se quedó trabajando durante
cinco años. Posteriormente se regresa a Miraca buscando el
calor de sus añorados viejos.
Estando
en el pueblo es cuando se alistas en la milicia desde donde es
enviado a pagar su servicio militar en el Cuartel Mariscal Falcón y
en el batallón Urdaneta. Para ese entonces era comandante de
la Institución un gran soldado falconiano nacido un poco más
abajo de Taratara, la Bajada de Cumarebo, el Coronel Ordóñez,
quien muriera durante el golpe de estado contra el General Isaías
Medina Angarita Este Señor dándose cuenta de la
preparación y capacidad de Aquiles, lo tuvo a su disposición
como una especie de lugarteniente.
Después
de pagar el servicio se reengancha permaneciendo en dicha institución
por unos siete años.
Durante
sus tiempos libres Aquiles estaba permanentemente estudiando,
devorando libros, haciendo cursos por correspondencia, de
contaduría, electrónica, Ingles, Mecanografía y
otros cursos con los cuales no hacía más que formarse
para los grandes retos que la vida le tenía preparados.
A
su salida de la vida castrense Aquiles consigue empleo en el
reformatorio, especie de Escuela de Artesanal que funcionó
donde actualmente se encuentra la Unidad Geriátrica.
Allí se desempeñó como instructor. En este
Centro de Formación la juventud desocupada aprendía un
oficio productivo tanta para la institución como para ellos
mismo por cuanto el beneficio obtenido por la venta de los productos
era repartido equitativamente. Los alumnos de esta institución
aprendían los siguientes oficios: Zapatería,
Carpintería, Curtimbre, Cerámica fábrica de
jabones y otros relacionados con el agro y la cría.
A
su salida del Reformatorio Juan Crisóstomo Falcón se va
a Aruba a trabajar en la empresa petrolera. Después de su
breve pasantita por la industria, regresa a Coro, para trabajar
en el ayuntamiento como escribiente. Así fue ascendiendo hasta
llegar a la gobernación para desempeñarse como
Pagador, Cajero, Cajero Jefe y Tesorero del Estado.
Aquiles
Mujica era un hombre fe. En los comienzo de la comunidad cristiana de
San Juan Bosco, miembro de la cofradía de María
Auxiliadora. En nuestro barrio fue apreciado por ser un hombre
desprendido generoso y solidario con los necesitados. Sus
conocimientos de enfermería obtenidos durante su estadía
en el ejército le fueron de gran utilidad para ayudar a
aquellos que tenían necesidad de una inyección o una
medicina.
LOS DIFUNTOS QUE VENÍAN EN LA TIERRA PARA EL RELLENO
Esta
es una de esas extrañas historias que alguna vez le
pasa a alguien en la vida.
Se
trata de que en los comienzos de la fundación del barrio
como ya hemos dicho, en tiempo de lluvia, el sector se convertía
en un inmenso pantano, de allí el nombre que se le daba al
mismo. Entonces todo el que hacia su pequeña casa de
barro o bahareque, buscaba la manera de conseguir algún
tipo de tierra para rellenar los alrededores.
Un
día que hacían reparaciones a nuestra
catedral de Coro, primada de América, estaban los
constructores amontonando cierta cantidad de tierra o escombros,
situación que aprovechó Aquiles para solicitar de estas
personas le fuera donada aquella tierra.
Efectivamente,
la diligencia de Aquiles tuvo su resultado, ya que le fue concedido
el material que había solicitado.
Sucedió
pues que la constructora le envió la tierra para el relleno, y
no tardó mucho en buscar a un trabajador para que le
ayudara a regar en el solar las camionadas de tierra que le habían
enviado. Fue así cuando a medida que fueron extendiendo los
escombros, iban apareciendo algunos restos humanos que
de alguna manera alarmaron tanto a Aquiles como el trabajador. Por su
puesto que Aquiles muy preocupado acudió a los constructores
para comunicarles el hallazgo. Estos le respondieron que
pasarían a retirarlos pero jamás pasaron. A Aquiles no
le quedó más remedio que juntar aquellos huesos y
colocarlos con gran respecto en un rincón del patio. Aquellos
huesos fueron objeto de veneración por parte de Aquiles, quien
desde entonces les encendía habitualmente velas aquellas
ánimas que fueron echadas del lugar donde presuntamente
debieron descansar para siempre. Lo cierto es que estos o estas
personas quienes debieron se muy importante por haber sido
enterradas en una catedral, se encuentran en nuestro barrio,
humildemente enterradas en el solar de Aquiles bajo un pequeño
túmulo que le hiciera un vecino, Julio González.
¿Fueron restos de algún santo religioso o religiosa, o
a caso un importante gobernante de la colonia?. A Aquiles hijo
le pregunté por curiosidad, si de alguna manera estas ánimas
se hacían sentir y me manifestó que jamás en
su casa han experimentado alguna manifestación extraña.
Según Aquiles, de lo que si está seguro es de
experimentar una cierta seguridad y protección por parte
de estas agradecidas almas.
Monche
se dedicaba a la venta de Escabeche actividad en la que
competía con Dolorito Borregales otro personaje de la
comunidad que elaboraba los más sabrosos chicharrones de Coro
TEODORO
HIGUERA
Teodoro
Higuera Uno de los fundadores de San Bosco. Aunque se residenció
en el sector en el año 1943 lo estaba pateando desde niño
por el hecho de haber nacido probablemente en Campo Alegre, lugar que
localizado en la antigua carretera Coro Punto Fijo, detrás de
los médanos.
Andrés
Teodoro Higuera Loaiza nació 9 de noviembre de 1900 en
Campo Alegre. era hijo de Manuel Felipe y Francisca Loaiza. El
progenitor de Teodoro era nativo de la Retama. Hijo una
higuera y un Amaya. Como todos los muchachos de entonces, Andrés
Teodoro seguramente se ocupó de de los oficios
propios del niño campesino, buscar el pasto para dar de comer
a los animales, ordeñar las cabras, buscar leña para el
fogón, buscar el agua, hacer los mandados, mantener la huerta
familiar y hasta salir a vender a la ciudad alguna carga de leña.
Cuando
Teodoro se hizo hombre se fue a trabajar a Maracaibo en la
Embotelladora de de la Cerveza Zulia. De regreso
a Coro se desempeña en el gobierno estadal como celador de
Salina. En ese tiempo contrae nupcias con Ana Victoria, hija de Juana
Balbina García y Pedro Urbina, residentes también de
campo alegre, aunque la Señora Juana Balbina
procedía de Jadacaquiva. De esta unión nacen Cosme,
Félix, María de la Nieves, María del
Rosario, Fabián Roberto, y Ramón los cuales nacieron,
unos en Jaguideañez en salina Salina Grande y Casa e
Teja en Caño Amargoso. Otros hijos nacieron en Coro, entre
ellos Roque, Benigno, Ana, Jesús, Neyda, Carmelina y Teodoro
Jr. La partera de Tana era Rosa Zavala En estos sitios estuvo
residenciado Teodoro con su compañera de vida debido al
trabajo de Celador, responsabilidad que también asumió
en otros lugares de geografía falconiana en las Salinas de
Mitare, Codore, Sauca, Las Cumaraguas y Salina Grande de Paguarita.
Cuando por razones de trabajo Teodoro tenía que ausentarse
siempre dejaba a su mujer en compañía de algún
concertado, muchachos que siempre estaban dispuestos a realizar
pequeñas labores domesticas por una pequeña
remuneración en aquellos tiempos donde no abundaba el trabajo,
entre esos muchachos estuvo mi padre Lorenzo Tellería, José
Pimentel, José del Carmen Cahuao, mejor conocido como Checame,
y Juan Barriga.
Cuando
las Salinas fueron parte del pasado Teodoro consigue un empleo en el
Ministerio de Obras Publicas. Su última actividad laboral la
desempeñó en asuntos de mantenimiento y vigilancia
en la Emisora Radial, Ondas del Caribe.
TEODORO
HIGUERA
Gregorio
llegó Coro, desde El Suruy con una familia de apellido Quevedo
la cual lo puso a vender natilla y más tarde empanadas por las
calles de la ciudad. Sucedió un día que estaba
vendiendo empanadas por los lados de la cárcel o la Sanidad se
encuentra Gregorio con un señor que le pregunta por pura
casualidad de donde era y que apellido tenía, él le
responde que había venido de El Suruy y que su apellido era
Leones. Cuándo aquel señor escuchó el apellido
le dice a Gregorio ¿tu no serás familia de la viejita
que me crió a mí, por que ella es de apellido Leones?
Gregorio se puso pensativo y recordó que su mamá le
había contado que su abuelita se había venido de El
Suruy desde muy joven y no se había sabido más de ella,
Gregorio volviendo de su meditación le responde aquel señor,
- puede ser.- Ese día Gregorio se olvidó de las
empanadas y se fue con aquel desconocido a conocer a la señora
de apellido Leones de la cual le había hablado el
desconocido. Cuando aquel desconocido, que tenía por
nombre Julio Catalino le presentó nada más y nada menos
que a su abuelita María de Jesús, esta se puso tan
feliz de conocer a su nieto, hijo de aquella niña que debió
dejar allá en El Suruy en sus años de moza. Desde
aquel momento Gregorio se quedó con su abuelita y desde
entonces recorre las calles de de Coro y de mi barrio
ejerciendo como electricista domestico, oficio que aprendió
trabajando con un portugués mientras en su casa hacia
circuitos con baterías de carro, posteriormente hizo un curso
en INCE para profundizar sus conocimientos.
LOS CAZADORES DE CONEJOS.
Este
evento era un encuentro de franca camaradería de mucha solidaridad, todo se
compartía, la merienda el agua el cigarrillo y hasta el producto de la caza
Desde
mi infancia me acostumbré a ver la organización de la caza de conejos en mi comunidad, por cuanto era
una costumbre muy antigua entre los corianos sobre todo de las partes llanas tanto
de Paraguaná como de Coro. Los
conejos, las iguanas y el pescado no
faltaban en la dieta de los que vivían en el camino peninsular. Mi papá y sus
hermanos se criaron en El Faro lugar donde estaba la sede del telégrafo que
atendía mi abuelo José Blanco Fuente, en ese ambiente aprendió desde temprana
edad a realizar actividades relacionadas con la caza y la pesca en compañía de
su hermano mayor Francisco Tellería, por los alrededores de Tacuato, el Cayude,
Caseto y otros lugares que ya no recuerdo. Cuando muere mi abuelo la cosa se
puso muy difícil lo que levó a mi abuela entregar algunos de sus hijos bajo la
figura del concertado; era una forma de lograr un empleo para el hijo que
tendría que convertirse como en una especie de criado quien hacia los oficios
de la casa de contratante. De esta manera una madre que tenía varios hijos resolvía
de esa forma situación económica del grupo familiar. Es así como estando bajo
la responsabilidad de Teodoro Higuera, con quien vivió algún tiempo en Hawideañez.
Por ese sitio a la altura de Paguarita puso en práctica lo aprendido de la
caza. Cuando definitivamente la abuela Rosalía se viene al Pantano y se
residencia cerca de la huerta de Pedro Franco en lo que hoy se conoce como la
Calle Miranda, los hermanos vuelven a juntarse. Los chicos de Rosalía ya
comienzan a tener familia y hacer amistades, siendo en esta localidad donde
comienzan a poner en práctica un sistema de caza colectivo entre los amigos los
fines de semana comenzando dicha actividad con el contacto obligado con quien
pudiera tener un carro disponible camión o camioneta donde poder desplazarse
hacia el lugar escogido para la faena que podía ser en cualquier lugar llano
donde poder correr.
Lugares
de Caza
Estos
lugares al Oeste son, Santa Rita, San Rafael
Los Algodones, La Estacaíta, El Jebe, Bocata e Tura y La Boca del Tanque;
En Coro se hacia la caza en toda la llanura que se extendía desde la Av. Pinto
Salina hasta las Calderas (Trapichito, San José, 5 de Julio y el Rey del Bosque)
y por el lado de los médanos en Los
Pozones; Frente a Sabana Larga se cazaba desde El bar Las Mercedes hasta El
Piripicho. Al norte se casaba por lados
de Tacuato en Arenas Blancas, Paguarita, Los Cegues, Los Camarones, Palencia y
hawideañez.
Medios
de Transporte.
Las
personas que ofrecían sus camiones eran Sigilfredo Castro, Arcadio Chávez, Ali
Hidalgo y Prisciliano Manaure; En carritos: Ramoncito la tortuga, Ampa, Lorenzo
Tellería, Perucho Gomez entre otros.
Los
Cazadores:
Lorenzo,
Francisco y Emilio Tellería, Juan Hurtado, Teodoro y Cecilio Zea, Teófilo, Garcés,
Pedro y Polo Garcés; Juan de Dios, Cachote, Abrahan Erves y William Hurtado, Anibal
Marín, Teodoro Cahuao, Pedro, Calatayud, Juana y Hermes Blanco, Alejo, Víctor y
José Peniche, Tomas y Tinche Ugarte, Antonio Borges. Anibal Guanipa y Ali
Guanipa
Otro
grupo de cazadores que poco se juntaba con el grupo anterior era el que
formaban Teodoro Higuera con sus hijos: .Roque, Roberto, Benigno y Jesús,
Rigoberto y Jacobo Molina y Eustoquio Loaiza
La
costumbre caquetía de cazar conejos era con un palos curvo en la punta, lo
llamaban conejero. La estrategia consistía en rodear los tunales o mogotes
donde los conejos tenían sus madrigueras,
uno o dos de los cazadores comenzaba a golpear y hacer ruido jopeando para que estos se espantaran mientras los
demás se mantenían atentos para iniciar la persecución tras la veloz liebre.
Solo los expertos podían matar un conejo con el conejero, algunas veces los conejos se cansaban y los agarraban con
las manos. Otras veces las liebres también vencían a los cazadores. Algunos
cazadores también usaban piedra o una
pequeña bola de hierro.